Una de las campañas más prolíficas que he generado personalmente en mi vida es «1 CM DE HECHOS». Durante la pandemia, tomé muchas decisiones con mi alma, a pesar de que he descuidado mis empresas y mis amigos cercanos.

Cuando la llama de un proyecto me atrapa, cuando la pasión se cuela en mi ser, ¡soy imparable! Si miro hacia atrás, en 2020 nadie ni nada me podría haber detenido. En ese momento, negro para mí no tenía más propósito en la vida que ayudar. Poder contribuir al alivio del estado general de pánico, poder aliviar un poco la enfermedad, aunque yo también tenía miedo, hizo que este periodo fuera más fácil de tragar. Mis canales en las redes sociales existían solo para recaudar fondos, para donaciones y para casos sociales. Yo era una especie de agencia de noticias. Durante el día enviaba donaciones, por la noche escribía.

He puesto mi hotel a la disposición de las autoridades de forma gratuita y lo he convertido en una unidad de alojamiento para los que estaban en cuarentena. Todos mis restaurantes entregaban comida gratis. Nunca hemos solicitado ni aceptado de las autoridades rumanas ninguna compensación financiera o de otro tipo. Hemos rechazado toda ayuda o fondos para evitar cualquier especulación.

Yo personalmente he donado dinero, bienes y servicios que valen más de 350.000 euros. Hemos generado 1,5 millones de euros que hemos donado a los hospitales afectados. Un día, se me ocurrió una idea brillante: hace muchos años, cuando estaba en una etapa avanzada de desesperación y frustración por no poder ganar dinero, he leído en Internet que un tío ganó 1 millón de dólares vendiendo píxeles. Su brillante idea se me quedó grabada en la mente, así que la puse en práctica después de 15 años.

Pero creo que mi idea ha sido más original que la suya. Os cuento: he convertido en centímetros cuadrados el Primer Metro de Autovía, que yo mismo he construido como un manifestó contra la falta de autovías en Rumania, y vendí cada centímetro de mi kilómetro, por la suma de 10 euros/m². Quien tomaba más, tenía una propiedad más grande. Como la carretera tenía 1 metro de largo y 30 metros de anchura, el resultado fue que teníamos de 300.000 centímetros cuadrados para vender.

La idea ha generado una solidaridad inmensa. Todo el dinero fue a parar en las cuentas de la Cruz Roja de Suceava, con las que íbamos a comprar miles de equipos médicos y consumibles. Recaudamos una suma colosal, 1,5 millones de euros, más de lo que el tío ese había conseguido con su web: http://www.milliondollarhomepage.com/.

Después hemos comprado una unidad móvil de cuidados intensivos (nos ha costado 700.00 euros) y hemos equipado varias salas de hospital con respiradores y otros equipos específicos (Hospital Suceava, Hospital Fălticeni). Actualmente estamos a punto de construir un hospital en Gura Humorului, Bucovina, que sería un estreno en nuestra ciudad (www.1cmspital.ro).